Por su naturaleza, ir de campamento puede ser la mejor experiencia de nuestros hijos, es una actividad que viven intensamente y les puede aportar muchos conocimientos y vivencias que difícilmente consiguen con otras actividades.
Existen muchas razones para ir de campamento, nosotros consideramos más importantes las siguientes:
- Diversión. Es muy importante a la hora de elegir un campamento que los niños disfruten y se sientan cómodos. Revisa el programa de actividades con detalle y asegúrate que las actividades ofrecidas son del interés de tu hijo. Existen campamentos de idiomas, multiaventura, arte, deporte, tecnología, ciencias… El abanico de opciones es enorme.
- Amistad. Realizarán nuevas amistades con las que vivirán la mismas experiencias. Se hacen amistades muy fuertes e intensas en tan poco tiempo.
- Normas. Aprenden normas de convivencia básicas como el respeto por los compañeros, las instalaciones, los monitores, la naturaleza…
- Valores. Aprenden a trabajar en equipo, la solidaridad, la autoestima, la independencia o la competitividad sana.
- Aprendizaje. Independientemente de la temática del campamento, tu hijo va a aprender muchas cosas realizando juegos, talleres, manualidades…
- Actividades. Realizarán actividades que normalmente no pueden hacer en su centro escolar o en su casa como las actividades multiaventura o acuáticas.
- Autonomía. De manera natural, los niños aprenden a adaptarse a un nuevo entorno afrontando situaciones fuera de su entorno familiar, favoreciendo la autonomía personal siempre bajo la vigilancia de monitores.
- Ayuda a conciliar la vida laboral y familiar. El campamento es el regalo perfecto para premiar el esfuerzo académico que el niño ha realizado durante el año escolar.
- Desarrollo personal del niño. Adquieren madurez, aceptarán las normas establecidas así como en la realización de cada una de las actividades.
- Convivencia. Convivirán con niños de edades similares realizando rutinas diarias de higiene y limpieza.